Mi Partido Liberación Nacional debe replantearse si se mantiene dentro de la que fue su ‘Casa Internacional’ la Internacional Socialista (siempre y cuando deje de ser usurpada).
Tuvimos tiempos de mucha gloria representados en La Internacional Socialista por don Daniel Oduber Quirós, luego por don Rolando Araya Monge y por último por don Bernal Jimenez Monge cuando nos representó ejerciendo la Presidencia del PLN.
Considero que lo más recomendable en este momento para el PLN es la redefinición o ratificación de nuestros principios ideológicos, que considero que en lo sustancial no hemos cambiado. Tenemos que hacer un ‘mea culpa’ pues en nuestro transitar cotidiano como correligionarios, en la mayoría de los casos, hemos dejado a un lado esos principios consagrados en nuestra Carta Ideológica y cda cual ejerce los cargos ya sea en Gobierno o en la Oposición a su antojo y libre inspiración.
A veces se nos olvida practicar en el ejercicio de la Función Pública lo que nos dictan nuestros postulados y vemos a compañeros que se creén independientes una vez que llegan al desempeño de sus curules o de sus puesto. Todo esto se da por la falta de rendición de cuentas ante un Partido Sólido y Monolítico y con Poder, que mantenga un Código de Ética siempre vigente como herramienta indispensable para supervivir y tener razón de ser.
Ese Código de Etica tiene que ser de verdad (y no de mentirilla como lo practica el PAC), pero que a ese Partido que hoy nos gobierna le sirvió en las campañas políticas para escalar a Zapote y sacarnos a nosotros del Ejercicio del Poder.
Para mi modesto entender, no importa si el Partido Liberación Nacional esté o no esté adscrito a una Internacional, lo importante es que nos redefinamos y establezcamos las pautas éticas de cómo nos vamos a presentar al Electorado. Si no ¿para qué militancia en lo Internacional o en lo Nacional?
He querido aprovechar este tema de las Internacionales para dejar sembrada la idea a los liberacionistas y no liberacionistas sobre la necesidad imperiosa de que tenemos que replantearnos o confirmar nuestros principios ideológicos y si no acompañamos esa redefinición con un INFALIBLE CODIGO DE ETICA Y UNA COSTUMBRE ANUAL DE RENDICION DE CUENTAS mejor no nos metamos en política y sigamos observando que cada cuatro años vemos a los mismos compañeros repitentes escalonando puestos de diputados, lógicamente usando la estructura del Partido.
Cómo conseguir lo que les presento: con un Congreso Ideológico que tenga las metas muy claras de sus objetivos.
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