I. PREÁMBULO
Enrique Obregón Valverde es un pensador, un filósofo de la política. Sus reflexiones son inteligentes y buscan influir, tener un impacto en la acción de los grupos socialdemócratas del país.
Por esas razones, su aporte para propiciar el debate en el grupo Raíces, dentro del Partido Liberación Nacional, es como siempre interesante, creativo y polémico. Nadie pone en duda su premisa básica en el sentido de que América Latina, y todas las democracias están urgidas de buscar y encontrar soluciones económicas y sociales que permitan la doble respuesta a los problemas que la globalización acarrea y a la consolidación verdadera de la democracia.
Sostiene Obregón que no es necesario usar como nueva la terminología de tercera vía, pues en el fondo, desde sus orígenes la verdadera tercera vía ha sido y sigue siendo la social democracia, para luchar por valores e implantarlos en el quehacer social. El método es más flexible, porque lo grave sería que en nombre de la democracia, y de la globalización se genere una crisis social, que dejaría al único sistema que responde a los valores del humanismo sin alternativa, y probablemente conduciría, como ocurrió en el pasado a dictaduras sin esperanza.
Así, Obregón desea que en medio del proceso de globalización, se discuta y se marche por rumbos acertados capaces de ofrecer democracia, empleo, bienestar y por lo tanto no confundirse, pues el cambiar de época no puede destruir valores fundamentales del ser humano.
Luis Garita Bonilla
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